Verso para profesores de idiomas dado por Rudolf Steiner al maestro de griego y latín en la inauguración del Secundario de la primera escuela Waldorf, Stuttgart, Noviembre 1922. Traducción de Florencia Toscani.
A aquel que comprende el sentido del lenguaje,
el mundo devela
su forma de idea.
A aquel que escucha el alma del lenguaje,
el mundo presenta
su esencia verdadera.
A aquel que vive las profundidades espirituales del lenguaje,
el mundo da libremente
fuerza de sabiduría.
A aquel que amorosamente piensa en la palabra,
la palabra entregará
su poderío interior.
Así pues orientaré mi corazón y mi mente
hacia el alma y el espíritu de las palabras.
En el amor por ellas
me sentiré entonces
completo y entero.