INTRODUCCION A LOS NUMEROS – Por Elena Forrer
Primer grado
El currículo de primer grado se presenta a los niños de manera que atraiga su imaginación. Aunque la capacidad de la memoria empieza a desarrollarse -la caída de la dentición nos indica esta maduración- los niños también confían en su sentidos para su aprendizaje.
El rico contenido de imágenes que los cuentos de hadas ofrecen, van a ser la base para el desarrollo de las letras en la lectura y para el aprendizaje de los números.
Para el niño de primer grado los números inicialmente tienen un aspecto cualitativo antes que el cuantitativo. El maestro presenta los cuatro procesos: adición, sustracción, multiplicación y división. A esta edad el niño primero “siente la cantidad y la falta”. El maestro explora el aspecto cualitativo de la cantidad antes de la abstracción. Es decir, la ardillita va a recolectar sus nueces o su falta, porque otra ardillita se comerá las nueces. El maestro explorará el valor le lo que significa la adición y sustracción. También la división y multiplicación. Más ardillas amigas llegarán para multiplicar o dividir el monto. Una vez que el niño ha experienzado cada proceso, el maestro progresivamente introducirá la representación del número y proceso en el tablero. Recordad que en Waldorf primero es la experiencia y después, la abstracción. El alumno va a sentir este aspecto cualitativo que creará la base futura para su aprendizaje de aritmética.
¿Qué hacemos en la clase de español? También nosotros mostramos el aspecto cualitativo del número cuando nuestros gnomos cuentan los diamantes que van metiendo en sus saquitos mientras trabajan en la mina o cuando contamos las manzanas que hay en el árbol durante nuestro círculo o parte rítmica de la lección. Por ejemplo con un tambor o dando palmas, podemos dejar que los estudiantes cuenten, añadan y sustraigan haciendo juegos de adivinanza. Durante este año vamos a contar escaleras, contar y descontar piedras, contar y seguir descontando hacia delante y hacia atrás 20, 19, 18 , 17 caminando, saltando o creando secuencias con movimiento de piernas y brazos.
En segundo grado
En segundo grado en la clase de español introducimos el número de una manera abstracta y comenzamos a pensar en el número de una manera cuantitativa. Es decir, ya ponemos una representación en la pizarra. El número despierta al alumno y vamos a realizar juegos de adivinanza. Es por eso por lo que muchas veces el maestro de la lección realiza unos minutos de “matemática mental” al comienzo de la lección. Aunque las tablas de multiplicar aparecen en primer grado, va a ser en segundo grado cuándo los alumnos van a practicar las tablas de multiplicar con su maestro con profundidad. Así, hasta el tercer grado.
En la clase de español, vamos a seguir contando (y sustrayendo) rítmicamente de dos en dos, cinco en cinco, etc., normalmente como componente de la parte rítmica de la lección, vamos creando secuencias de movimiento y contando.
A veces vamos a contar elevando la voz de 1 a 10, y otras, mientras nos vamos agachando bajando la voz de 10 a 20 y así sucesivamente o al revés.
Una vez sentados, también podemos practicar por medio de juegos de adivinanza. Por ejemplo, podemos comenzar pidiendo a un voluntario que nos susurre un número al oído entre 8 y 20 (se escriben en la pizarra estos números). Ahora el número comienza a tener una cualidad cuantitativa y es por lo comenzamos a practicar también con su representación en la pizarra. La clase tendrá seis oportunidades para adivinar el número que el alumno nos ha susurrado al oído. El alumno elegido, también conducirá el juego llamando a los compañeros que levantan la mano. Cada vez que se nombra un número, el maestro escribirá el dígito en el tablero. Así hasta que aciertan. Si no se adivina el número, el niño que dirige el juego podrá elegir a otro compañero para escoger otro. Este juego ayuda al niño a conectar la cantidad con el dígito representado.
Otros grados
A partir de tercer y cuarto grado el maestro en la clase de español en la parte rítmica de la lección procederá incrementando la dificultad de las secuencias contando de diez en diez y al revés, por filas, individualmente números de teléfono, día de nacimiento, etc. También incorporando movimiento de pies y manos alternativamente y rítmicamente dificultando las secuencias. Una vez sentados, juegos de número de memoria, juegos como bingo y otros como Tic tac toe, son siempre útiles y divertidos. A partir de ahora, el maestro incrementará la dificultad hasta que los alumnos se sientan cómodos.
Una práctica excelente a partir de quinto grado, es hacer un dictado de números. El maestro dictará en inglés varios números; por ejemplo: 57, 77, 385, 592, 1011, etc. Después, pedirá a diferentes alumnos que escriban cada número del dictado en la pizarra. Este ejercicio mantiene a la clase muy atenta, callada y concentrada.
Hay cantidad de ideas que se pueden compartir. Espero que esta introducción ayude a los maestros ha entender la perspectiva de este tópico en la enseñanza Waldorf sobre todos en los dos primeros grados.
Proyecto a distancia de números y juegos con piedras pintadas a partir de Segundo Grado.
Podemos jugar a Tic-tac toe. Si estamos en Zoom, dividimos la clase en dos grupos: en este caso las abejas y las mariquitas. Cada alumno tiene que tener por lo menos tres animales de lo mismo. Si por ejemplo tenemos un grupo de 10 alumnos, podemos dividir cinco alumnos que serán abejas y cinco mariquitas. Los diez alumnos tienen que tener el mismo tablero de números que la maestro habrá distribuido en un paquete o copien el cuadro que hace la maestra por Zoom. La meta es que identifiquen el número en español y digan: “pongo la abeja en el número ocho”. Cada alumno tiene un turno. Si no saben número, pueden decir “paso mi turno a otra abeja o mariquita ” según toque (así evitamos la competición).

• Si ya están en tercer grado pondremos aleatoriamente números difíciles. Dividimos los grupos en: piedras y bloques.

Para cuarto o quinto grados idea a distancia: crear un dominó con piedras.